Ya era tarde, no serviría de nada que se arrepintiese de sus actos, pues agua pasada no mueve molino.
Nunca creyó que se vería metido en una situación igual, pero su testarudez le hizo creer que podía volar como una majestuosa águila, cuando no llegaba ni a gorrión.
Los últimos rayos rojizos del Sol de ese día, marcaban que el momento elegido había llegado. Llevaba días, semanas enteras esperando ese instante, esperando el gran día.
El viejo rey, no estaba dispuesto a dar autorización a que un simple caballero con un linaje tan bajo, tuviese un romance con su hija, por lo que para evitar su historia de amor, decidió organizar un duelo de sangre.
Como era habitual el torneo comenzó con los enfrentamientos con escuderos, y sus armas ligeras, a modo de aperitivo de los grandes duelos del torneo.
Llegó su hora, le habían elegido como adversario. El corazón le comenzó a latir intensamente, como si estuviese en un campo de batalla.
Iluminado por la débil luz de las antorchas , se subió a los lomos de su fiel caballo color tierra, y con el talón le dio un achuchón. Los dos rivales se lanzaron frente a frente con su montura y su arma.
No tuvo nada que hacer, la lanza del caballero de yelmo rojizo, impactó contra el morrión, por lo que joven aspirante cayó al suelo, inconsciente.
Perdió.
Pero al menos lo intentó.
APA...
........... LLARGA VIDA ALS SOMNIS I AL ROCK'N'ROLL!!!!!!
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